El beneficio de la duda

De entrada, vamos a decir las cosas claras. Hay personas que jamás tienen eso llamado "beneficio de la duda", porque lo sustituye el perjuicio de la certeza. En la vida, en el mundo laboral, familiar, político, apostólico y romano, hay seres que no engañan a nadie. A casi nadie.
También existen personas a las que aparentemente engaña mucha gente. Y eso no es necesariamente cierto. Puede ser conveniente aparentar dejarse engañar. Pero claro.. ¿ nos conviene tratar con personas que nunca se sabe en lo que creen realmente?. No lo creo.
Damos el beneficio de la duda a personas que conocemos poco, por lo general. A priori, no sabemos si son listas o tontas, honestas o deshonestas, leales o desleales, sinceras o mentirosas, capaces o incapaces, valientes o cobardes, generosas o interesadas.. Toda luz acarrea una sombra, toda cualidad tiene su reflejo negativo.
De manera que tendemos a evaluar a las personas con las que hemos de tratar por diversos motivos, y en ocasiones nos encontramos con seres absolutamente puros. Aquellos en los que todo es claramente estupendo, o todo es claramente basura. Son pocos. Y tratar con ellos suele ser fácil, siempre sabes de que van, no engañan más que a quien piensa que le conviene dejarse engañar. Y lo más importante: su contacto es tan contaminante, que situar en su órbita a otras personas permite saber que hay que andarse con cuidado con estas últimas. Ya sabéis, yo soy muy de "dime con quien andas".
Pero bueno.. la vida está llena de tonos grises. De repente, decidimos dar a alguien el beneficio de la duda dichoso: esperemos a ver como respira, como se conduce, como se comporta. Decidimos dar ese beneficio bien por desconocimiento de la persona, bien por el deseo de no ser prejuiciosos, o incluso, por el afán de que el susodicho acabe retratándose. Puede suceder también que estemos cruzando un terreno pantanoso, y en algún sitio hemos de intentar pisar para ver donde se nos hunde menos el pie. Y creedme. He llegado a la conclusión de que eso que llaman mal menor no existe, que elegir entre la caca y la porquería jamás da un resultado satisfactorio, y que las personas honestas no se juntan con según quien.
Pero he aquí que decidimos darle alguien el beneficio de la duda, y acaba retratándose, y optando por el perjuicio de la certeza. Generalmente, no vamos a expresar admiración por quien nos ha engañado, a no ser que seamos masocas. No vamos a aplaudir a quien se comporta de forma vil y traicionera, ya sea con uno mismo, ya sea con otros, a no ser que nosotros mismos seamos viles y traicioneros. No vamos a dar votos de confianza a quien claramente no la merece, a no ser que esperemos sacar un beneficio de ello. Y no vamos a querer en nuestro entorno a quien ha contribuido a corromper un entorno similar, a no ser que nos gusten los entornos corrompidos y putrefactos.
La bolsa de la basura, señores, siempre va a oler a basura. Y no se puede eliminar el olor del todo.
Con todo esto quiero decir, que cuando alguien se funde el beneficio de la duda que otros han puesto en él, lo lógico, lo normal, es que nadie de ese beneficio a la misma persona. Y si lo hace, es por pura deshonestidad, intentando sacar algo a cambio. O porque no tiene muchas luces. O por ambas cosas.

ES CIERTO

Vaya por delante que el objetivo de esta entrada no es la crítica, sino la defensa.

Como sabéis, formo parte de una lista a las elecciones para el Consejo Local, con la candidatura 2.0.

Ayer, en el grupo Magentas Debatiendo se creó un presunto debate, que no era más que un ataque mal encubierto, con el fin de poner en duda mi derecho a acudir a unas elecciones internas, debido, al parecer, a que mi marido concurre también a las elecciones, en su caso para el Consejo Territorial.

En primer lugar he de decir que es cierto. No solo tengo pareja, es que incluso estamos casados. Perpetramos el delito el 9 de Agosto de 1995, en los juzgados de la calle Pradillo. Fue cosa íntima y familiar, no tan intima como hubiésemos querido, pero si. Me casé, y como casi todas, lo hice con el vestido que más le gustaba a mi madre, con mucha ilusión, y con mucho acierto.

Es, asimismo, cierto, que mi marido es afiliado a UPyD, igual que yo. De hecho, el se afilió días antes. Me sugirió que echase un vistazo a la web, leí el Manifiesto Fundacional, y fue amor a primera vista. Este otro delito lo perpetramos a principios de 2012.

Durante todo ese tiempo, ambos hemos colaborado en todo lo que hemos podido, en lo que nos han dejado, y a veces, en lo que no han conseguido evitar. En mi caso, Grupo de Trabajo  de Familia y Asuntos Sociales del Ayuntamiento de Madrid, dando soporte a la concejala Cristina Chamorro. Suena muy bonito y lo es, pero os garantizo que supone mucho trabajo. Porque no es lo mismo ser concejal de PP, que son legión, que repartirse el trabajo entre unos pocos. A veces, había que preparar cosas en concreto para los plenos, buscar documentación, preparar argumentos, y ahí entrabamos los del equipo. Yo llegué a ese GT nueva e inocente, y al principio asustada. Porque vi gente muy preparada, con estudios específicos en la materia, mientras que yo tenía mi ingeniería agronóma sin terminar, y mis estudios de económicas sin terminar. No me avergüenza en absoluto reconocer que compagino estudios y trabajo desde los quince años, e hice lo que pude. Pues bien, en semejante ejercito de personas super preparadas, yo pregunté tímidamente quien se ocupaba de los temas relacionados con discapacidad, y la respuesta fue "Tú, por hablar".
Aprendí mucho , colaboré mucho, pasé fines de semana enteros ante el ordenador redactando informes, y fue la tarea más gratificante que he hecho hasta ahora. También colaboré en el programa electoral para las municipales del 2015. Al mismo tiempo, ya sabéis: Repartos, salidas, etc. Colaboración con el distrito (tengo un parque "propio", adaptado para niños con discapacidad en mi distrito. Yo prepare la propuesta y los vocales vecinos la defendieron con todo éxito en la JM). He sido apoderada en colegio electoral en todas las ocasiones desde que me afilié. He participado en más grupos de trabajo de Discapacidad, a nivel local y nacional, y Grupo de salidas informativas a usuarios de centros de salud. ... Siento si os estoy aburriendo, pero puesto que se ponen en entredicho mis capacidades, creo justo poder defenderlas.

Ya que la ofensa parece ser el hecho de que mi esposo también concurre a unas elecciones internas al mismo tiempo, aclaro que su trayectoria es igualmente intensa y extensa: Grupo de Expansión para salidas por toda la C.A.M. Grupo de Trabajo de Las Artes. Responsable de Logística del Distrito de Arganzuela ( lo que supone cargar mucho e ir saltando por encima de cajas de folletos, convirtiendo tu casa en una ginkana). Grupo De Trabajo de educación a nivel Nacional,  Grupo de Demoscopia y Análisis Electoral. Colaboraciones en cuantos repartos ha podido, y en el Grupo de salidas informativas a usuarios en centros de salud.

Como veis, el ser pareja no nos ha limitado a la hora de colaborar. Y entiendo que es discriminatorio pretender que nos limite a la hora de participar en unas elecciones internas.  Hemos salido a repartir juntos y separados. Hemos arrastrado a nuestro hijo a repartos y salidas cuando queríamos participar los dos juntos. Hemos tenido varios colegios cada uno como apoderados, mientras los abuelos se quedaban con el peque..

Creo que no necesitamos justificación alguna. Simplemente quería aclararlo.

Vamos en serio

Han sido varios meses de incertidumbres, intrigas, peleas.. pero sobre todo de esperas e inacciones.
En fin, es hora de acabar con todo esto.
Afortunadamente, la incertidumbre va desapareciendo. Las intrigas, aún no del todo. Pero todo llegará.
¿Acabaremos con los malos rollos entre nosotros?. Quien sabe. Quiero pensar que sí. Ante todo, creo que urge hablar entre todos de los problemas, y ver como los solucionamos. Ver que parte de lo sucedido se debe a malos entendidos, y cuantos objetivos comunes conservamos. Espero que sean muchos.
En cuanto a las esperas, se van a terminar, pero ya. Hay tarea que hacer, y hay trabajo para todo el que lo quiera. Tener " un sitio para trabajar", no va a ser un premio a la docilidad y al buen comportamiento. Va a ser lo que debió ser siempre: Un derecho. Un derecho que corresponde a una necesidad. No he entendido nunca que haya trabajo sin hacer y no se permita a la gente hacerlo. Ni que se paralice el trabajo cuando hay tantas cosas pendientes.
Volveremos a salir sin vergüenza ni miedo alguno. Saldremos a contarle a la gente lo que queremos hacer por ellos. Por todos. Lo que queremos para este país. Saldremos para recordarles lo que ya hemos hecho y lo que vamos a hacer, a ser posible, con su ayuda. Saldremos para dejarnos ver y para vernos, sin tanta virtualización ni tanta discusión tonta. Volvamos a juntarnos para hablar, para resolver problemillas que hayan quedado vivos. Para tomar unas cañas, aunque sea. Volvamos a juntarnos, y desde ahí, veamos cómo podemos hacer para seguir caminando juntos.
Por todos y para todos. Y con vuestra ayuda.
Besos

Pequeñas miserias.

La semana ha sido demasiado interesante, por así decirlo.
En primer lugar, voy a empezar con una confesión: Soy tonta. No quiero decir que tenga un CI bajo, que de eso no tendría culpa alguna. No. Soy tonta de un modo consciente y delictivo. Llevo mucho tiempo diciéndome a mi misma que lo mejor es no confiar en la gente para no llevarte chascos. Pero sigo tropezando en la misma piedra.
Eso es malo?. En este momento, si. No en otros. No con todo el mundo. Porque al otorgar confianza a la gente, tienes ocasión de conseguir excelentes amigos y compañeros. En general, las ventajas superan a los inconvenientes en calidad, que nunca en número.
Pero se te cuela el bicho por algún sitio. Es inevitable.
Cree un grupo de wasapp a principios de noviembre, con la única intención de tener un espacio sano para debatir sobre política. Y de entrada, inclui en el grupo a cinco personas a las que consideraba, y sigo considerando, de absoluta confianza. Varias de estas personas solicitaron que se incluyese a terceros, y accedí. He de decir que el bicho no entró por esa puerta. El error fue únicamente mio, y no puedo más que asumirlo y lamentarlo.
Semanas después , en otro grupo, se expulsó a una persona, claramente sin motivo. Se había tocado un tema que la administradora del grupo no debió encontrar de su agrado, y en el debate posterior, un afiliado debatió más de la cuenta, según ella, y lo expulsó. Lo encontré algo tan arbitrario e injusto, que mi reacción fue preguntarle a este afiliado si quería formar parte del otro grupo. Accedió.
Todo fue más o menos bien hasta Enero. Tras el Congreso, este personaje digirió mal los resultados, y desarrollo una curiosa y fructífera actitud de troll, no solo en nuestro grupo, sino en todos aquellos en los que participaba.
Mi fallo fue no querer ver lo que mucha gente me estaba diciendo. Este personaje no era de fiar en absoluto, anteponia su fallido juego de Tronos a cualquier cosa.  Pero, como en ese tiempo, habíamos pasado muchas horas hablando y el se definió como amigo ( cosa que a mi me pareció exagerar, pero algo quedo en el subconsciente), lo cierto es que yo pensaba que no había nada que temer.
Se habia hablado de muchísimas cosas de partido. Entre ellas, de los planes que tenemos para el futuro inmediato un grupo de personas. Enseguida me di cuenta de que esta información era un vox populi. No me importó demasiado. Pero había muchos indicios de la deslealtad de esta persona. Y no les di importancia, aunque si los veía.De hecho, veia crecer los indicios dia tras otro.
Hasta el otro dia. En lo que entendimos como una más de sus sesiones de tratar de irritar a los miembros del grupo, utilizó unos argumentos curiosos para "defender " de críticas argumentadas y fundadas a otra afiliada. Lo que sucedía, según él, es que "ya quisiéramos nosotras valer la mitad que ella, que pese a ser mujer, es ingeniera y además está buena"
En el aluvión de respuestas que siguieron a estas afirmaciones, hubo algunas, algo subidas de tono de otro compañero. Irónicas, y relativas todas a semejante forma de ver la valía profesional de las mujeres. Casualmente, este compañero está implicado en los planes antes comentados, y era urgente desacreditar,
Dicho y hecho. Al día siguiente, la señorita en cuestión, aludiendo a su dignidad como mujer ( que al parecer no se ve afectada por lo que se dice al inicio de la conversación) , publica fragmentos de la misma, sacados de contexto. Acusando de denigrar a quien le interesaba acusar, claro.
No sabemos si el correveidile habrá recibido su correspondiente palmadita en el hombro. Por nuestra parte recibió la expulsión inmediata que se merecía. Sobre los efectos que produce pensar que alguien en quien confiabas posiblemente estuvo todo el tiempo fingiendo y declarando amistad para conseguir información y pasarla a otros, creedme, es mejor no escribir.
El elemento en cuestión dice haberlo hecho por sus elevados principios morales, y porque los demás consentimos insultos y vejaciones. ¿La prueba de que esto es falso?. En el grupo todos eramos administradores, Incluido él. No vio necesidad de actuar, o era más rentable sacar el pantallazo y correr a por su hueso llevando la pelotita?
En fin. Hasta cuando te caes y te rompes una pierna, aprendes como se llama el hueso que te has roto.
La semana ha sido fructífera en aprendizajes, desde luego. He aprendido, no a no fiarme de la especie humana en general. A eso me niego. Gracias a esa costumbre mía, cuento con compañeros maravillosos, implicados, valientes, geniales, leales, sinceros, honestos, cabales... Podría estar poniendo adjetivos hasta mañana. Lo que he aprendido es que a veces, una se equivoca juzgando a la gente, y como dijo otro compañero del grupo tras la expulsión, cuando aparece un bulto sospechoso hay que extirpar,.
He aprendido que lo que deja de importar, puede seguir doliendo un tiempo, pero poco a poco, va desapareciendo.
He aprendido que hasta quien se cree general puede ser esbirro, y estar al servicio de no se sabe muy bien que.
Y he aprendido también a sacar pantallazos, y tengo unos cuantos.

¿Tenemos Presente?

La verdad es que no tenía ninguna intención de retomar el blog. Pero me he levantado pensando que a lo mejor era buena idea poner los pensamientos en orden y tratar de compartirlos; a ver si me salía.
Observo a muchos afiliados de UPyD expresar sus dudas acerca de cual puede ser nuestro futuro. Y a mí me preocupa el presente . Porque es lo que no veo claro.
Llevamos como medio año escuchando que íbamos a tener un congreso, tras el cual, decían, iba a ser todo estupendo, y todo iba a cambiar. Algunas cosas han cambiado, sí. No las suficientes, y no al ritmo adecuado, en mi opinión. Pero ya sabéis. Yo soy impaciente por naturaleza.
El III Congreso ha pasado, y los resultados son los que son. Estoy deseando ver los nuevos estatutos,y espero que se puedan ver pronto. Que se resuelvan los posibles impedimentos, si es que los hay, para que los podamos tener en la mano, leerlos, ver que ha salido, y tener que dejar de aguantar que algunos se empeñen en defender una etiqueta absurda que se han inventado ellos de forma interesada y que no ha de figurar en ninguna parte de esos estatutos, pues no constaba ni en la ponencia, ni en ninguna enmienda aprobada. La afiliación ya se ha pronunciado en cuanto a posicionamiento político, y no cabe otra que respetar lo aprobado.
En cuanto a la elección del CD, el resultado fue ajustado, y eso debería hacer reflexionar a todo el mundo. Somos pocos, y debería contarse con el posible buen hacer y el posible buen trabajo de todos los que quieran aportar. Aquí se hablaba de sumar y de innovar. No? Pues tal vez debamos todos tener cuidado de no restar, no dividir, y no hacer lo de siempre.
Pongo ejemplos.
Aprovechemos y agradezcamos cualquier ocasión de visibilidad en medios venga de quien venga, siendo, claro está , visibilidad para el partido. Sería estupendo no tener que leer comentarios absurdos acerca de "olvidar" la aparición de una compañera en una tertulia, e igualmente lo seria twitear sin que se omitiese el nombre de UPyD . Esto no es un patio de colegio, por favor.
Sea cual sea la causa de que se convoque a un acto público con pocas horas de anticipación, que e corrija cuanto antes, que esto no es, ni serio, ni eficaz.
Un poco de objetividad y de generosidad entre todos nosotros no iría mal de vez en cuando.Y redundaría en beneficio del proyecto. No me gustan las exclusiones, las vendettas ni los "puentes de plata".
Ojo con el trato. Y esto no es la primera vez que lo digo. Hay que tratar bien a quien ha trabajado por el proyecto, que se olvidan fácilmente las cosas. Por otro lado, la gente que ha demostrado su lealtad al mismo, es bueno que sea capaz de superar malos momentos y tratar de resolver posibles problemas
He dejado para el final el tema más espinoso. Hablar del futuro.
Yo creia y creo en el proyecto, y pienso que nuestro manifiesto fundacional es inmortal. Otra cosa es que , dados los resultados obtenidos hasta ahora, sea necesario tener la mente abierta en la medida de lo posible.
O sea, una cosa es afrontar cambios posibles de estrategia  que nos permitan la necesaria evolución que garantice nuestra supervivencia, y otra sería mutar hasta no reconocerse. O cerrar los ojos ante la aparición de un subconjunto que, según algunos, pretende escindirse, según otros, devorar al todo, y según los menos, aportar ilusión e ideas. No dudo que los participantes sientan que les aporta ilusión, pero ese sentimiento no es generalizado. A muchos nos aportan incertidumbre y desconfianza. Conocemos de ellos, mas o menos, sus orígenes, pero no sus fines.
Respetando, como no, los derechos que puedan tener a organizarse para tener ilusiones,entiendo que han de garantizarse también los derechos de os afiliados a UPyD. Básicamente, el nombre de UPyD es de todos, y no creo que haya de permitirse el uso particular de ese nombre por parte de un pequeño grupo , formado por afiliados y al parecer, por no afiliados.
Espero que todo se vaya resolviendo.

NO



Un millón de días sin escribir, lo sé. No tengo tiempo, no me faltan ganas, y estoy empezando a tener miedo de las cosas que escribo. Prometo leerlo cien veces antes de publicar...
No abandono la lucha. Yo no soy de los que se asustan, ni de los que esperan a ver de donde sopla el aire. No es lo mío. Yo cuando entré en esto no tenía metas personales,  tenía propósitos más amplios. Y los sigo teniendo.  No me quedaré quieta porque haya un importante grupo de gente que haya decidido que es mejor la quietud. Entre otras cosas, porque ninguna de esas personas se ha molestado en explicarme por que cree que es mejor lo que cree que es mejor. Jamás seguiré una teoría que no se me ha explicado. Eso es obediencia ciega. No, gracias.
Y no me apuntaré a ningún bando. En primer lugar porque ya me parece demasiado triste que haya bandos. Aquí teníamos todos, en teoría, un objetivo común. Si otros lo han olvidado, yo jamás. Hasta que algunos vuelvan a encontrar el momento de pensar en grande, veo la cosa muy fea. Se que algunos acabarán por encontrar ese momento. Y algún otro encontrará el momento de fingir que lo ha encontrado. Aquí os espero a todos, haciendo lo único que he hecho desde que empecé esta andadura. Trabajar .
Me habláis de esperar el momento oportuno, y yo os digo que, cuando se tiene fe y ganas, todos los momentos son oportunos.
Me habláis de limpiar la casa antes de invitar a nadie a ella, y yo os digo que mi habitación está limpia, y la de otros muchos también. Y que hay que tener algo de cuidado con lo que se utiliza para limpiar. Y que bienvenido sea el que quiera entrar por la puerta sabiendo que va a tener que ayudar a limpiar y a lo que haga falta.
Me contáis vuestras preferencias, o las adivino. Creo en la libre opinión de cada uno. Empezando por la mía. Tengo todo el derecho del mundo a querer trabajar. Tengo derecho a luchar a mi manera por aquello en lo que creo. Es mi derecho hacer lo que viene a ser lo único que puedo hacer, que no es que se me hayan dado tareas como para tenerme saturada... Es mi derecho, y voy a ejercerlo.
En cuanto a vuestras preferencias, yo no soy absolutista. No trabajo ni para mantener una corte, ni para cambiarla de sitio.
Pensad un poco. Por favor.

Los que no nos rendimos.

Dirijo esta entrada de mi blog a mis leales compañeros de partido, que no son todos. A mis guerreros y guerreras. A todos aquellos que se han dejado la piel todos estos años, y es más, pretenden seguir dejandosela. Y ahora van a tener que luchar contra los mismos enemigos de siempre, pero también contra otros que no se decir si eran amigos y ahora son enemigos, o si siempre han sido enemigos, pero no lo sabíamos.
Vamos a hablar claro. Siempre hemos sido pocos, y nos hemos conocido mucho. Alguno de los que ahora abandona el barco, lo hace como la rata que siempre ha sido. Que si, que vale, que no vamos a andar por las redes lanzándonos piropos entre nosotros, que luego lo aprovechan para decir que estamos siempre igual. Pero es verdad, y todo el mundo lo sabe, que aquí había gente que veia en esto una prolongación de su vida laboral. O a veces, una sustitución de una vida laboral que antes no tenia.
No critico que alguno haya intentado durante todos estos años arrimar el ascua a su sardina por el hecho de estar en una mala situación. Pero esto ha sido nefasto para el grupo, pues no han faltado quienes han visto en este colectivo un grupito de apoyo a sus intereses particulares. Nadie te apoya más que aquel que se siente agradecido. Lo malo de este grupito es la rapidez con la que ha salido por patas cuando han venido mal dadas. Porque no eran voluntarios, y lo tenían muy claro. Y si en algún momento estuvieron en esto por ideología, hace ya mucho que lo olvidaron.,
Con todo, están en su derecho de irse, y en algún que otro caso, era deseable que lo hicieran. Porque algunos están optando por otra alternativa, que consiste en quedarse a dañar la casa de todos. Han evolucionado de rata a termita. Se quedan el tiempo justo para votar la disolución, andan poniendo en twitter fotos de cuando quedan en casa de alguno para conspirar ( y lo dicen), sin darse cuenta de que esas fotos solo demuestran lo pocos que son y el mal gusto que tienen para la decoración.
Puedo entender que haya cierta rabia por haber perdido un puesto de trabajo ( bastante mal desempeñado, en algún caso), pero es lo que hay. Seguiremos sin vosotros, y contra vosotros si es necesario.
Otro capitulo son los callados. Ahora que algunos claman por la disolución, y otros nos organizamos como sea para poder seguir, es fácil identificar a un grupo que está agazapado sin pronunciarse, hasta ver de donde sopla más fuerte el aire. Y este grupo me preocupa, porque en él hay más de uno al que nadie iba a echar de menos. Alguno de ellos empieza ahora a hacer RT en cosas puestas por Gorka Maneiro, y esto me da que pensar que la matemática está de nuestra parte, porque si no, de esos no tendríamos ni las noticias.Se quedarán de momento,y eso puede venir bien para hacer bulto.
El viernes pasado pudimos ver que somos muchos los que queremos seguir trabajando. Y habrá que organizarse para hacerlo. No olvidemos esos meses en los que no se ha hecho nada. Así no podemos seguir. Personalmente, agradezco a la actual gestora su valor y sus esfuerzos, pero a la hora de votar en un congreso lo haré según lo que vea, no según las palabras que oiga.
Y no estaría de más que se hiciesen públicos los nombres de aquellos miembros del Consejo de dirección que el pasado 16 de enero pretendían disolver sin contar con nadie. Nueve, para ser exactos, según mis noticias.Nueve personas elegidas en julio en una lista cerrada bajo el nombre "Unidos por UPyD". ¡Ja!.   A mi que no me miren, yo voté a La Alianza.  Si descartamos a los que después han pasado a formar parte de la gestora y hacemos números, nos encontramos con una eurodiputada que pretendía disolver. O con un miembro de la actual gestora que pretendía disolver... Para evitar sospechas, señores, nada como la luz del sol, que decía la difunta...