Es dia 12, al fin. Llegó el momento de analizar los resultados del CEX.
De entrada, como he dicho cien mil veces, yo apoyaba la candidatura 4. Y quiero decirlo hoy de nuevo, a toro pasado, para que no haya dudas. No me gustaba la candidatura de Unidos, porque lo veía más de lo mismo. No me gustaba la candidatura de Renovadores, porque de ella, es que no me podía creer ni el nombre. Para mí, las cosas no podían seguir como estaban, de forma que no me valía apostar por el continuísmo de lo que tan malos resultados nos ha traído hasta ahora. Y sí, soy partidaria de renovar, pero no de renovar el acta de diputada de una señora cuya lealtad es más que cuestionable. Alguien a quien he de decir que no me creí nunca. Alguien que concurrió en listas a las generales sin ser siquiera afiliada, espero que hayamos aprendido algo acerca de los fichajes y de esa figura de los "independientes".
Con lo cual para mí el resultado no es perfecto, pero está bien.
En primer lugar, el porcentaje de votos obtenido por La Alianza es bueno. 225 votos, con nuestros escasos medios, sin publicidad en los medios, nada más que con el buen hacer , la voluntad, el trabajo y el esfuerzo de quienes componían la candidatura y de quienes hemos considerado oportuno apoyarles. Si el nuevo CD actúa con inteligencia, no perderá de vista estas cifras. Somos un buen grupo, y no sería fácil neutralizarnos. Ya hemos demostrado todos que no somos de los que se largan ante los contratiempos, somos de los que se quedan y actuan, y que no se les olvide.
En segundo lugar, desaparece el fantasma de la venta-liquidación, que muchos pensamos que quería efectuar Irene Lozano. O sea, entregar las armas y esclavizar a lo que queda del ejercito a cambio de un puestecillo para ella en las listas de CS,que ya sabemos que ella no considera imprescindible eso de afiliarse.Esta señora rehusó hacer pactos con otras listas, con el argumento de que nadie salia en la tele tanto como ella. Seguro que ahora lo lamenta. Si tiene una próxima ocasión, puede pactar con la Carta de Ajuste. Paso de ser políticamente correcta: Ala, bonita. A pastar.
Que nadie interprete con esto que yo estoy contenta con el resultado, porque no lo estoy en absoluto. La candidatura de Herzog es demasiado autocomplaciente para mi gusto. Demasiado carente de autocrítica. Demasiado "lo mismo de antes", y sobre todo, muy tibio todo, muy pocas ganas veo de hacer cambios, y no sé si están dotados del suficiente realismo para afrontar la dificultosa situación en la que está UPyD.
Pero es lo que ha elegido un 43% de los que han votado. Por otra parte, han votado muy pocos y esto es de por sí, un dato pésimo. Ese 43 % significa, no lo olvidemos, que un 57 % eligió otra cosa. Un 57 % es previsible que no elegirá a Herzog en unas primarias. Y eso es algo que el nuevo CD tendrá que tener en cuenta, es una simple cuestión matemática.
Llega el momento de construir con lo que queda. Primero habrá que ver lo que queda. claro. Ya se ha anunciado alguna que otra baja, en mi opinión no demasiado llorable, pero sigo defendiendo que aquí hacemos falta todos. Todos los que somos de UPyD, claro. Los que venían a pillar cacho, y ya tienen claro que de momento no, pueden elegir entre marcharse o esperar, que aquí no se obliga a estar a nadie. Eso sí, lo deseable es que se queden a trabajar. A trabajar, no a aparecer en el ultimo momento en los actos para hacerse la foto junto al candidato . Porque no se los demás, yo me harté durante la última campaña de ver los grupos de "señoritos" que se consideran demasiado importantes para ponerse a repartir y acercarse al ciudadano. Digo yo que a estas alturas se habrán dado cuenta de que sin esfuerzo no se llega ni a la esquina. Alguno se ha dado tanta cuenta que se ha ido, por cierto
¿Se nos va a dejar trabajar a todos? Yo tengo algunas dudas. Conociendo el "buen hacer" de alguno que otro, fijo que muchos de los que hemos apoyado públicamente las candidaturas no ganadoras vamos a ser condenados al ostracismo, si nos dejamos. No estaría de más, pues, recordar algo. Lo primero, si La Alianza no se hubiese presentado, Unidos no hubiera conseguido su nada aplastante victoria, y tal vez a estas alturas ya no tendríamos partido. Lo segundo, si hay que trabajar, no somos tantos como para que anden eligiendo demasiado. Y lo tercero, hay que saber medir las propias fuerzas. Y muchas personas que apoyan de boquilla no son demasiado efectivos a la hora de trabajar.
La verdadera jornada de reflexión es la de hoy. Hágalo cada cual como pueda.
