Vistas de página en total

domingo, 13 de octubre de 2013

EL BIEN COMÚN Y EL INTERÉS PARTICULAR

En el momento de empezar esta entrada, tengo claro que voy a hablar de algo que muchos tenemos en la cabeza, pero en general no queremos mencionar.
¿Qué es lo que nos lleva a complicarnos la vida metiendonos en política?
Para esto, cada uno tendrá su propia respuesta, y me temo que algunos tienen dos respuestas: Una, la que se dice en público, y otra, la que ellos conocen en privado.
A ver, que nadie empiece a afilar los cuchillos. En primer lugar, no estoy diciendo que a todos los que estamos en esto nos guíen intereses ocultos. A algunos, muchos, nos guían intereses comunes que son más o menos conocidos,. Y no creo que haya nada de ilícito en esto. Todo lo contrario.
El interés en política es, a veces, como la pulga de la Chelito,. No sabíamos bien donde lo teníamos escondido, pero cada vez nos pica más. Que se le va a hacer, supongo que hay algo adictivo en todo esto. Todos empezamos hablando de regeneración y de bien común. Lógico, que si no, no estaríamos aquí. Me he enterado de que las cuotas  de afiliación al PP y al PSOE salen más baratas, y si dejas de pagar no te borran ni nada.De manera que vamos a partir de la base de que todos llegamos de buena fé. O al menos, el 99% llegamos de buena fé... ¿El 90, puede ser...?
Desgraciadamente, no creo que nos falten los parásitos. Y si no los tenemos aún, irán llegando, me temo. Al olor de los sondeos favorables, ciertas especies que ven peligrar su habitat, hasta ahora natural, van a emprender una migración hacia tierras que preven más cálidas.¿Es posible que alguno de estos especímenes haya tenido suficiente visión de futuro como para haber emprendido la migración mucho antes de que el resto de sus congeneres fuese consciente de que su habitat político estaba en peligro?. Digamos que no es imposible. O sea, que podemos tener parásitos que han llegado con mucha anticipación y a los que no sea nada dificil restringir. ¿Es malo cambiar de ideas? Tal vez no, todo depende de los fines que uno persiga. Y mucho me temo que exista un riesgo de haber adquirido mercancía de dudosa calidad, que con el tiempo vaya a ir desvelando sus defectos de fabrica, pues hemos de tener en cuenta que puede haber leones que abandonen prematuramente la manada pues saben que siendo los miembros menos valorados de la misma, serían los primeros en verse afectados por la escasez de alimento .
Contra esto, poco puede hacerse para evitar que lleguen. Pero debe hacerse todo lo posible para detectar las situaciones peligrosas y ponerles remedio cuanto antes. Imagino que nadie quiere correr el riesgo de que nos convirtamos en algo muy parecido a aquello contra lo que estamos luchando.
Pero no todo es parasitismo.A mi me preocupa que puedan darse casos de comensalismo. Es aquella relación en la que intervienen dos especies, y mientras una de ellas se aprovecha, la otra no se ve afectada. Vamos, que ni se da cuenta. Lo malo es que un comensal se puede convertir facilmente , no ya en parasito, sino en depredador.
Todo el mundo tiene intereses particulares. Lo que pasa es que algunos son más aceptables que otros.
Si echamos un vistazo a las cosas que todos nosotros escribimos, vemos que aquí cada cual tiene su pequeña obsesión. Llegamos a UPyD arrastrando nuestra propia maleta, y solo cada cual sabe lo que lleva en ella.
Empiezo por un "mea culpa". A mi me obsesiona la situación de la gente con discapacidades, y el abandono por parte de las administraciones. Me preocupan especialmente todas las medidas encaminadas a menguar derechos y recursos de este colectivo. Sobre todo, porque, dada la vulnerabilidad de estas personas, entiendo que todas estas medidas van a costar vidas, y a veces se me ocurre que tal vez es esto lo que se persigue. La pura y simple eliminación progresiva de personas a las que solo se ve como un gasto.Puedo estar equivocada, supongo
A otros les obsesionan otras cosas. La monarquía, la república, las autonomías, el terrorismo, la ley de violencia de género. He de decir que comparto alguna de estas preocupaciones, por supuesto.
¿Es incomplatible estar obsesionado ocn un tema en concreto, y pertenecer al partido?
No. No lo es. Yo creo que no lo es.
Siempre y cuando no pierda uno de vista el interés común, claro. Porque si se pierde de vista,primero, lo que habría de ser simbiosis se convierte en comensalismo.
Tampoco podemos olvidar cuantos ojos hay puestos sobre nosotros, y cuanto interés hay en perjudicar a UPyD. Y que, detrás de cada decima aumentada en los sondeos, hay horas y horas de trabajo voluntario, que no recibe más pago que la satisfacción de leer el metroscopia de turno y ver el crecimiento. No podemos olvidar que muchas veces, horas y horas de busquedas en el ordenador, de participar en grupos de trabajo, en mesas informativas, y miles de etceteras, se ven recompensados con la simple elucubración acerca de las horas que han pasado algunos en la cocina antes de publicar una encuesta. Con la comtemplación de las reacciones contra nosotros en las redes sociales el dia que toca encuesta. El miedo de lso demás alimenta, y mucho.Un ejemplo de esto sería si yo me abro un facebook, coloco en primer lugar el logo de UPyD, más grande que mi foto, y una vez allí, me dedico a lanzar calificativos hacia, por ejemplo, Ana Mato, llamandole algo que tiene cuatro letras, empieza por N  y contiene una Z. Eso, lo puedo hacer en todo caso de forma privada y sin causar problemas a otros.
Si olvidamos esto, perjudicamos a todos. Nos perjudicamos a nosotros mismos. Ya no seriamos comensales, sino parásitos.
Con todo esto no quiero decir que tenga que haber ningun tipo de censura, Si acaso, una auto llamada a la responsabilidad.
Cuestiones ideológicas aparte, me preocupa, y mucho, la motivación que puedan tener aquellos que se nos vayan acercando. No porque hayan pertenecido o simpatizado con alguno de los partidos grandes, o con el mediano.Se puede entender el desencanto. ¿quién no lo ha sentido alguna vez?.Lo que me preocupa es que ese desencanto, que es muy lógico desde el punto de vista del ciudadano, puede no ser nada conveniente si hablamos del desencanto de quienes han formado parte del problema, y ahora empiezan a pensar que el grupo al que han pertenecido hasta ahora no van a estar en condiciones de agradecer los servicios prestados.
Tenemos mucho camino por recorrer. Muchísimas cosas por hacer. Entiendo que , entre ellas, es importante tener control sobre nosotros mismos. Hemos de estar preparados para lo que se nos viene encima.

No hay comentarios:

Publicar un comentario