Cuando hablar es perder el tiempo.

Con twitter me ocurre lo mismo que tiempo atrás me pasó con el tabaco. Se que lo tengo que ir dejando, pero no me decido.
En general, es interesante . El hecho de que exista una limitación de caracteres hace que los comentarios estén muy sintetizados. Y posiblemente,que algunos confundan la brevedad con la rapidez y no se tomen el tiempo suficiente para pensar en lo que escriben.
Mea culpa, el otro día me metí en un charco por las prisas. Respondí a un sujeto ,un tal Alvaroc93 que, claramente, tiene unas ideas que yo no comparto. Bueno, dicen que la diferencia es algo que enriquece, y que debatir es bueno. Yo así lo creía, hasta que empieza a decir cosas como que las medidas de Rajoy benefician al que menos tiene. Que el liberalismo beneficia al que menos tiene. Como no podía creer lo que estaba leyendo, hice lo que debí hacer en un principio, y no hice por las prisas: Miré su perfil.
¡Madre mía!. Un miembro de las NNGG que aparece en la foto con la mismísima Espe. En ese momento, lamenté haber entrado en una discusión. ¿Qué hacía yo hablando de derechos sociales con alguien a quien eso le importará un pimiento?.
Me producen cierta urticaria los defensores a ultranza de lo indefendible, que claramente no están mirando más intereses que los suyos propios. Oye, que yo, si se trata de debatir, encantada. Pero no con alguien así,eso es perder el tiempo. Está defendiendo cosas en las que no cree ni él mismo, pero hay intereses detrás. Esta es la forma de hacer política de algunos.
Pero claro, siempre se puede empeorar la opinión que se tiene de una persona. Y este mismo chaval (el niño de Espe, al parecer. Nos falta encontrar a la famosa niña de Rajoy), mantiene una interesante conversación con un tal Miguel Angel Martinez, que afirma que la solución al problema de los incendios es que trabajen en su extinción los presos de las cárceles, y así amortizamos lo que nos cuestan. Alvaroc93 dice que no le parece mal. pero que el problema para él va a ser que esa medida será criticada por la izquierda, porque no es "politicamente correcta".
Bueno, no creo que tengan ni puta idea acerca de lo que es politicamente correcto, claro está. Pero no me pude contener y les respondí, sugiriendo que, de paso, los presos podían hacerles otro Valle de Los Caidos.Para el tal MAM, mi comentario es "obsesivo" (creo que quiso decir ofensivo en realidad).El caso es que termina llamándome bolchevique y diciendo que estoy para que me lo hagan mirar.
No , no soy bolchevique. Incluso voté a Aznar una vez, aunque me avergüence reconocerlo. Pero esa conversación deja claro por donde se pasa esta gente los derechos de los demás. Y deja claro también que no han aprendido nada en muchos años. Y que han tenido cachorros que heredan ciertas ideas.
¿Combatir los incendios con trabajos forzados?. No, gracias. Una sociedad moderna y civilizada no hace eso. Un país bien administrado dispone de medios para prevenir y combatir el fuego,porque no los ha malgastado.Y si no los tiene, sabe de donde obtenerlos sin esquilmar a la población. Un gobierno eficaz ya hubiese tomado medidas para recortar el gasto autonómico, antes que quitar asistencia sanitaria a emigrantes, por ejemplo. Un gobierno honrado hubiese tocado a las Sicav, antes que subir el IVA.
¿Estoy para que me lo hagan mirar? Posiblemente. Lo cierto es que me alteran los ineptos, y hay muchos, Me alteran los administradores que meten la mano en la caja. Me alteran los niñatos que están el las NNGG dese los dieciséis, sin duda, aspirando a estar algún día de palmeros en el congreso gritando "que se jodan",y aun tienen el morro de decir que les preocupa el bien común. No me altera que un vestigio del pasado emerja de su propia caspa para llamarme "bolchevique sin rumbo y sin sentido". Porque no da ni una. Ni soy bolchevique ( quizá para él sea bolchevique aquel que defiende derechos humanos, y también se equivoca), ni carezco de rumbo y sentido. Los tengo. Y tengo una meta. Acabar con todo lo que ellos representan. Pero siguiendo las reglas de la democracia que ellos quisieran destruir. No pretendo que acaben construyendo mausoleos ni apagando fuegos.